Lyon es considerada la capital gastronómica de Francia, y destaca por su pintoresca ubicación entre los ríos Ródano y Saona, su dinámica cultura gastronómica y sus numerosos monumentos históricos. La ciudad demuestra que lo viejo y lo nuevo se pueden mezclar de forma elegante, con un casco histórico catalogado como Patrimonio de la Humanidad, y una variada colección de animados bares, discotecas y centros comerciales.
Cosas que hacer en Lyon
Trasládate al pasado mientras contemplas el conjunto de edificios centenarios de Lyon, entre los cuales destaca la Basílica de Notre-Dame de Fourvière, del siglo XIX, que alberga una galería de arte religioso y presenta cuatro emblemáticas torres octogonales. Viaja aún más lejos en el tiempo en el antiguo Teatro de Fourvière, que comprende las ruinas de dos anfiteatros romanos en los que hoy en día se celebran conciertos al aire libre y festivales.
Combina la historia de la ciudad con la tranquilidad de la naturaleza en el Parque de la Tête d'Or, del siglo XIX, donde podrás pasear por senderos rodeados de estatuas históricas, fuentes de agua tranquilas y extensos jardines de rosas. Place Bellecour no está lejos y también presume de árboles frondosos. Esta popular plaza pública a menudo alberga puestos de flores, además de una pista de patinaje sobre hielo durante el invierno.
Descubre la cocina local en los elegantes restaurantes de los alrededores de Saint-Georges, donde podrás disfrutar de las vistas de la ciudad mientras degustas delicias francesas y cócteles en el restaurante Tetedoie. No te olvides de La Cuisinerie, un moderno restaurante de tapas, o Mouss'tache, un local rústico de ladrillo perfecto para comer a altas horas de la noche.
Si eres amante del arte, no te pierdas el Museo de Bellas Artes de Lyon, donde podrás explorar una impresionante colección de pinturas, artefactos y esculturas modernas y antiguas. Después, dirígete al barrio de La Croix-Rousse, donde podrás disfrutar de mercados regulares, arte callejero y actuaciones de jazz.
Cómo moverse por Lyon
Se puede llegar fácilmente a Lyon desde el aeropuerto de Lyon-St-Exupéry, que está a 25 kilómetros del centro de la ciudad, en autobús o tren. Una vez en la ciudad dispones de autobuses públicos, tranvías, dos funiculares y un metro de cuatro líneas. Si lo prefieres también cuentas con taxis y servicios de alquiler de bicicletas.