Quizás no sea la capital andaluza más monumental, pero sus encantos no pasan desapercibidos. La esencia marinera de Huelva es indiscutible y palpable en su ambiente y su cocina, y se funde con la tradición minera de la región, el carácter abierto de sus lugareños y el legado aventurero que dejaron las expediciones colombinas que zarparon de sus costas.
Cosas que hacer en Huelva
Puedes iniciar tu recorrido en el centro histórico de la ciudad, aquí, el epicentro es la plaza de las Monjas, siempre bulliciosa y llena de gente. Puedes pasear hasta la luminosa y barroca catedral de la Merced y luego volver sobre tus pasos para visitar la elegante Casa de Colón, un edificio emblemático de la ciudad que originariamente hospedaba a los grandes ejecutivos británicos y hoy día es lugar de celebración de exposiciones y festivales.
En tu recorrido por la ciudad no tendrás más remedio que caer rendido ante la gastronomía onubense, el tapeo en Huelva es excepcional, tanto por los productos frescos del mar (no hay quien diga que no a unos chocos fritos o a una barriga de atún) como a los de la tierra (ese jamón ibérico no va a comerse solo). Para experimentar el auténtico sabor de Huelva también puedes aventurarte en el mercado del Carmen.
Huelva tiene también un aire inglés que no dejará de sorprenderte. Puedes empezar con el barrio Reina Victoria, se trata de un auténtico barrio de casas inglesas con un sabor andaluz muy peculiar, construido a principios del siglo XX para los obreros de la Riotinto Company, que explotaba las minas. Luego dirígete al muelle del Tinto, utilizado por la compañía para embarcar mercancías y desde el que podrás contemplar los atardeceres más increíbles sobre la ría de Huelva.
Cómo moverse por Huelva
La ciudad no es muy grande y puedes explorar el centro a pie, pero también puedes recurrir a los autobuses urbanos o al carril bici que recorre la ciudad. Si pretendes aventurarte al resto de la provincia, lo mejor es que alquiles un coche para moverte sin restricciones.